La familia es la base principal de cualquier niño, y en el seno de la familia es el lugar donde se formará su autoestima y personalidad, partiendo de esa base se podrá comprender el entorno familiar que tenga el niño será decisivo para su desarrollo.
Una gran cantidad de personas creen que la educación de los niños comienza en la escuela, pero esto no es así, la educación de un niño comienza desde su concepción, desde las emociones y los cuidados que los bebés perciben en el vientre hasta nacer y vincularse con sus principales figuras de apego.
La sensación de seguridad es clave para relacionarse sanamente con su entorno, durante los primeros años de vida, los padres deben establecer relaciones y espacios en el que el niño se sienta seguro, para ello pueden establecer diferentes mecanismos de seguridad y protección gracias a la asesoría de un cerrajero experto, pero a nivel emocional es mucho lo que se debe aprender.
Pilares que influyen en el aprendizaje de los niños
Las palabras influyen en el aprendizaje de los niños, pero el ejemplo es esencial, de esta forma, nuestra actitud y nuestros actos son esenciales, así como la relación que tenemos con nosotros mismos y las personas que nos rodean.
Sus padres, así como otras figuras de apego serán sus guías y serán referentes para que los niños absorban toda esta información y la practiquen diariamente, cabe destacar que hay tres temas básicos que necesitan los niños y niñas para crecer de forma sana e integral:
El afecto: sentirse siempre queridos y amados a través del contacto, las miradas, la presencia, la risa y los juegos, es esencial para que los niños aprendan a amarse a sí mismos.
La pertenencia: sentir que son valiosos dentro de la familia y que tienen un lugar y un papel importante en el que pueden aportar, así que todos los seres humanos contribuimos desde el momento en que aportamos y ayudamos porque somos seres sociales.
Estructura: las estructuras cumplen un rol similares a las señales de una carretera, es la que le da las pautas al camino que debe seguir, le orienta y le brinda seguridad, se pueden dar estructuras firmes a los hijos si se establecen relaciones sanas, además de establecer límites necesarios y respetuosos, esto se puede ofrecer en una ambiente en casa seguro y ordenado para que pueda moverse y explorar.
Por su parte, las rutinas también pueden ofrecerle una buena estructura, ya que le brindan orden y protección, esto le ayudará a incrementar su independencia, estas rutinas con el tiempo se convertirán en hábitos sanos.
En conclusión, estos son los pilares esenciales que los padres deben brindarle a sus hijos para un mejor aprendizaje, estos pilares le permitirán crecer, aprender y desarrollarse de forma sana, de lo contrario algo no estará bien.
Cuando un niño observa diariamente la forma en que sus padres se tratan y se aceptan serán el patrón a seguir para relacionarse consigo mismo y con los demás, así que las actividades diarias y el ejemplo serán esenciales en su aprendizaje.
